Hagamos las paces Vía Crucis y Resurrección de la escuela

El 1 de abril se cumplen 17 años de la promulgación de la LOPNNA. La vida de  los NNA no debiera ser tan dura para ellos. Hoy trabajar en una escuela es acto de héroes, ser niño, niña o adolescente en Venezuela es como una carrera de obstáculo, como un Vía Crucis con varias estaciones, a pesar de la  Constitución y la LOPNNA

Primera estación: ayer no hubo agua en la escuela, hoy tampoco. No nos extraña que haya inasistencia,  es que hace días que no hay agua en la comunidad tampoco, ¿cómo lavan los uniformes las mamás? La CRVB (Art. 117) dice que tenemos derecho a servicios de calidad”   Esta cruz es pesada. La escuela necesita agua para que esté limpia, también para las maticas, los jardines educan. Y las madres pasan a veces toda la noche esperando el agua para lavar. No creerán, pero en Ciudad Guayana, entre dos grandes ríos, hay comunidades que pasan días y días sin agua.

Segunda estación: otra vez pupitres vacíos por falta de alimentos. Tiene razón la maestra: “la letra con hambre no entra”. Hay estudiantes que se desmayan, “no comí nada anoche”, dicen, y lo que llega del Sistema de Alimentación Escolar no alcanza ni para todos, ni para todos los días. Ahora se “desaparecen”  meriendas, eso nunca había pasado. Los dramas no están en los cuentos: están en los compañeritos. “Danos hoy nuestro pan de cada día” rezan los niños.

Tercera estación: ¡Robaron otra vez a la escuela! Este año una escuela de Maturín la han robado 5 veces, y una de Valencia 8, ¡Hasta los cables de la luz! Da miedo llegar los lunes, dice una Directora. Computadoras, comida, cables, ¿Cómo estudiamos así? La CRVB dice que tenemos derecho a la protección contra los delitos comunes. (Art. 30)

Cuarta estación: robaron a la maestras y a unos niños cuando venían  a la escuela. Uno se queda con miedo cada vez que escuchas esos cuentos: nos roban los morrales, las cosas de las maestras… Antes los delincuentes respetaban a los estudiantes, pero claro, roban y no les pasa nada.  La CRVB dice en su artículo 50 que ternemos Derecho al libre tránsito. Creo que menos peligro hay en la selva o en el bosque que en la comunidad.

Quinta estación: William dejó los estudios, iba para 4 año, pero en el barrio no hay bachillerato completo, siempre dicen que ya lo van a construir pero nada, y eso de ir a otra comunidad es fregado: pasajes, inseguridad… se puso a trabajar. La LOPNNA dice que retenemos derecho a   la educación (ART. 53) pero para eso tienen que haber liceos. Yo quiero llegar a la Universidad.

Sexta estación: Las leyes no se cumplen. La maestra dice que la LOPNNA está vigente desde el 2000, y que es la Ley que nos debe proteger, pero yo veo que nuestros derechos están muy golpeados… veo que también Constitución la violan… La maestra dice que nosotros debemos cumplir los Acuerdos de Convivencia… ¿Cómo hacemos para la LOPNNA sea una Ley de verdad?

Séptima estación: “¡Todos al suelo por que se presentó una balacera. Nada de asomarse, niños, todos al suelo! ” Así dijo la maestra, y así nos quedamos hasta que no se oyeron más tiros. Ya no hay hora segura. A veces avisan: “Salgan temprano”. Difícil oír clases así. El otro días pasamos tres días sin clase, las mamás no nos mandaron, “todas la balas matan”, dice la maestra. La LOPNNA dice que tenemos Derecho  a la vida (Art. 15), yo digo que tenemos derecho a llegar a viejitos como mi abuelita.

Octava estación: Hace un año mataron a Ana, era alumna de 5to año de una escuela en La Vega, Caracas,  ya se iba a graduar. Hubo un atraco en el bus donde iba… ella salía para su pasantía. Duele saber que un pupitre quedará vacío para siempre. Dicen que la juventud es el futuro, pero sin presenta no hay futuro.  Hay muchos NNA muertos por violencia en Venezuela. CECODAP dice que el año pasado murieron violentamente 1150 NNA. ¡Esta es la guerra! Otra vez recuerdo que la CRBV  y la LOPNNA dicen que tenemos Derecho a la vida.

Pero en la escuela también hay domingo de gloria. Se resucita cuando los maestros y maestras traen dos arepas de sus casas y le dan a los que saben que no han comido; se resucita cuando sabemos que hay gente “apadrinando” niños para que puedan comer hay resurrección cuando sabemos que las organizaciones juveniles, como Huellas, pasarán Semana  Santa en Campamentos Misión; hay resurrección cuando sabemos que en 16 ciudades del país se están formando nuevos Grupos de Madres Promotoras de Paz… Uno se  anima, pero se pregunta porqué serán tan difícil ser NNA en este Venezuela.

Luisa Pernalete