Marjana Lleshi: «Pensé que iba a morir cuando las paredes del convento se colapsaron»

Una de las religiosas supervivientes del devastador terremoto en Italia

La monja, albanesa, asistirá el 4 de septiembre a la canonización de madre Teresa

En ocasiones se cumple el dicho de que una imagen vale más que mil palabras. En mitad del caos que se produjo el miércoles en Italia con el devastador terremoto hubo una fotografía que dio la vuelta al mundo. Era la de una monja superviviente sentada en el suelo con el velo ensangrentado. Acababa de sobrevivir al derrumbe del convento donde reside en Amatrice y estaba escribiendo mensajes de texto a sus familiares para tranquilizarlos.

Después de la tragedia, la agencia de noticias Associated Press ha logrado dar con ella. Se trata de la hermana Marjana Lleshi, de 35 años, natural de Albania y destinada a la localidad italiana. Con el susto aún en el cuerpo, la monja recuerda con terror lo vivido. «Pensé que iba a morir cuando las paredes del convento se colapsaron«, narra.

Marjana Lleshi estaba durmiendo en el convento Don Minozzi, junto a la Iglesia del Santísimo Crucifijo en Amatrice cuando tembló el suelo a las 3:36 horas. Ella estaba allí junto a otras seis monjas cuidando de seis ancianas. Su orden, Siervas del Señor, se dedica a la gestión de guarderías y a prestar ayuda a las personas de la tercera edad.

Después del terremoto, la monja se despertó cubierta de polvo y sangrando debido a un golpe en la cabeza. Estaba atrapada. Tardó unos segundos en percatarse de la gravedad de lo que había ocurrido y de inmediato empezó a solicitar ayuda.

Al verse en esa situación perdió toda esperanza de salir con vida del convento. Envió una serie de mensajes a sus amigos para que orasen por ella y su alma. «Me despedí de ellos para siempre», relata. Aunque hubo otros mensajes que no se atrevió a enviar. «No podía despedirme de mi familia porque tenía miedo de que a mi padre le diera un colapso emocional y muriera al escuchar algo así».

Sus gritos de auxilio fueron finalmente escuchados por su «ángel». Un joven de los que atendía también a las ancianas en el convento acudió en su ayuda. «En ese momento oí una voz que me llamaba, ‘¡hermana Marjana, hermana Marjana!‘». Este hombre fue el encargado de rescatarla y acompañarla hasta un lugar seguro. Fue en ese momento cuando la monja se sentó en el suelo, aún temblando, y empezó a enviar mensajes de texto a sus amigos y hermanas para contarles que había sobrevivido a la tragedia. A un fotógrafo de la agencia de noticias italiana ANSA le impactó mucho esa situación y decidió capturarla con su cámara. Esa fotografía dio la vuelta al mundo y apareció en numerosos medios de comunicación internacionales.

La hermana Marjana Lleshi necesitó atención médica por haber inhalado mucho polvo de los escombros y por su herida en la cabeza. Precisó unos puntos de sutura, pero lo peor ya ha pasado.

Ahora más que nunca tiene la ilusión de viajar a Roma el próximo 4 de septiembre. Ese día es la canonización de la Madre Teresa Calcuta, la monja de origen albanés que «dio esperanza a aquellos que no la tenían». Aunque confiesa que será difícil, en el terremoto fallecieron tres hermanas y cuatro de las ancianas que cuidaban, además de las pérdidas incalculables de la comunidad en general.