TEMA 3:  EN LA FAMILIA PUEDES DESCUBRIR LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO.

  “La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría.” Papa Francisco.

¿Cómo  transmitimos esta alegría del encuentro con Jesús dentro de las familias?  La familia es el elemento más cercano que tenemos para conocer a Dios y entender su misterio, y a través de la filiación y el amor, elementos indispensables en toda familia, nos orientan hacia la vida de la fe y así nuestra vida pueda ser una vida plena y feliz.

En la familia se  puede descubrir esa alegría del evangelio, a través del amor que es Dios   (1 Jn 4,8) y cumpliendo el mandamiento del amor (Jn 13,34-35) en la vida familiar.

Siendo la familia la imagen que proyecta a Dios, a su amor, entonces el enemigo, busca destruir nuestras familias y lo logra arrancando de ellas,  la vida espiritual.

Cuando  los miembros de la familia se  preocupan unos por los otros, especialmente por los niños, los ancianos, quienes son más frágiles y  que a menudo se quedan en la periferia de nuestro corazón. Los cónyuges se guardan recíprocamente y luego, como padres,  cuidan de sus hijos, y con el tiempo, también los hijos se convertirán en cuidadores de los padres.

En familia se vive la alegría del Evangelio cuando unidos se trabaja la solidaridad, la fraternidad, se comparten tantos momentos inolvidables: las comidas, el descanso, las tareas de la casa, la diversión, la oración, las excursiones y peregrinaciones, la solidaridad con los necesitados, esos momentos deben ir acompañados del amor, de la alegría, ya que el amor auténtico nos lo da Jesús.

Vivir la alegría del evangelio en familia no es fácil con tantas dificultades y amenazas que conllevan a la separación y desunión del núcleo familiar, por eso les exhortamos a renovar y mantener la esperanza, la fe y el amor, para poder evangelizar con nuestro testimonio de vida cristiana.

ILUMINACIÓN BÍBLICA:  FIL. 4,4-7

CONCLUSIÓN: Sabemos que no es fácil vivir la alegría del evangelio con tantas dificultades y  amenazas que  conllevan a la separación y desunión del  núcleo familiar, por eso les exhortamos a renovar y mantener la esperanza, la fe y el amor, para poder evangelizar con nuestro testimonio de vida cristiana.